Aunque hay vestigios de pequeñas poblaciones desarrolladas y ya estables habitando estos lugares desde el año 1000 a. C., es muy poco lo que se sabe a cerca de ellas; sin embargo, la primera población importante se desarrolló por los años 200 y 500, denominada Huaynaroque, bajo la influencia en primer lugar de los Tiahuanaco, seguido de los Collas y por último, los Incas.

Al parecer, Juliaca deriva de la palabra quechua ‘Xullaca’ o ‘Xullasca’, que significa rocío o humedad del amanecer (suceso que es más notorio a inicios de la estación de invierno). Es muy probable que Xullasca haya sido fundada en la época Inca, aproximadamente en el año 1448.

Xullasca es mencionada por primera vez por el cronista español Pedro Cieza De León (1520-1554), quien documentó mucho acerca del Perú y del mundo andino de esas épocas. En uno de sus registros escribió que Xullasca era un pequeño pueblo ubicado entre Pucará y Atuncolla (Sillustani).

Con la llegada de los españoles, Xullasca pasa a ser un repartimiento y su nombre es cambiado a Santa Cecilia de Juliaca, unos años después y por razones poco claras, este nombre es nuevamente cambiado a Santa Catalina de Juliaca (aproximadamente en 1630).

Entre los años 1600 a 1821. Juliaca se desarrollaba lentamente. En estas épocas se construyó el templo de Santa Catalina, el cual tomó construir más de 100 años y recién fue concluido en el año 1774. Por estos años también se da la rebelión de Túpac Amaru II (1780), de la cual Juliaca también fue partícipe apoyando la causa libertadora.

Si bien es cierto que el Perú alcanzó su independencia en el año 1821, cabe recalcar que esta independencia no fue total. Territorios como la intendencia de Puno, a la cual pertenecía Juliaca, aún estuvieron bajo dominio español hasta el año 1824, año en el cual recién se reafirma la independencia del Perú. Precisamente en este año es que se crea el distrito de Juliaca, bajo el mandato de Simón Bolívar. El distrito de Juliaca perteneció en una primera etapa a la provincia de Lampa hasta el año 1854, y a partir de ahí y hasta el año 1926, fue un distrito de la provincia de Puno.

Uno de los hechos más importantes de este primer siglo de independencia fue la construcción del ferrocarril Arequipa – Puno, concluido en el año 1873, esto hizo que Juliaca revolucionara y cambie para siempre hacia un perfil más moderno y comercial. Los años siguientes la población concentró todos sus esfuerzos en que Juliaca se convirtiera en una nueva provincia.

Ya en un nuevo siglo, el 6 de setiembre de 1926 y después de mucho esfuerzo, por fin se creó la provincia de San Román, el cual tenía 3 distritos: Juliaca (capital), Cabana y Caracoto. (En 1958 Cabana se divide en dos y de ahí nace el cuarto distrito llamado Cabanillas; por último, en 2016 Juliaca también se divide en dos, dando origen al distrito adherido de San Miguel).

La provincia fue nombrada así en honor a Miguel de San Román, ex diputado puneño que impulsó la creación de la provincia, en el gobierno de Augusto B. Leguía por Ley Nº 5463, y aunque la ley se promulgó el 6 de setiembre, la inauguración de la nueva provincia recién se celebró el 24 de octubre de ese mismo año (1926).

La ciudad crecía y con esto también la necesidad a ciertos servicios básicos, los cuales no eran atendidos por el gobierno central ni regional; debido a ello, el 4 de noviembre de 1965 Juliaca alza su voz de protesta por alrededor de 10 días en pro de una mejora y más atención; murieron 4 personas y hubo muchos heridos, aunque fue un suceso triste, esto también marcó un antes y después en cuanto a la imagen de Juliaca.

Entre la década de los 60’s y 70’s se crea y establece la zona industrial juliaqueña, paso muy importante hacia el desarrollo hasta nuestros días. En estos años también se edifican sitios importantes como los primeros mercados, centros comerciales y otros.

La década de los 80´s se marca principalmente por dos hechos importantes: primero, la creación de la universidad Andina Néstor Cáceres Velásquez en 1983; y segundo, la construcción del actual aeropuerto Inca Manco Cápac de Juliaca. Por otro lado, cabe mencionar la construcción de lugares como el hospital nuevo, galería de las calceteras, Cristo Blanco (1987), entre otros. También por estos años empezó a funcionar el mercado Túpac Amaru.

En los 90’s lo más importante fue el asfaltado de la mayoría de carreteras que conectaban a Juliaca con otros destinos importantes (Arequipa, Cusco, Huancané, Lampa). En lo que se refiere a aspecto, la ciudad ya era considerablemente grande, el centro se veía similar a como hoy lo vemos, pero no había tanto tráfico ni tanta población, y lo más llamativo en las calles era la abundancia de triciclos.

 

Desde el 2000 a estos días, Juliaca ha seguido sumando hechos importantes, sobre todo en la primera década, como la creación de la tan ansiada Universidad Nacional de Juliaca en 2007, la integración a la carretera Interocéanica o la llegada del primer centro comercial moderno. En años más cercanos, pareciera que Juliaca ha frenado un poco su progreso y en comparación a décadas pasadas, estos últimos años hay poco por resaltar.

Hoy Juliaca luce muy poblada a la vez descuidada, con varios problemas y muchísimo por mejorar y esto tiene que ser un llamado de atención para cada ciudadano. Pero antes de criticar o ser pesimistas, es mejor tomar conciencia de cuanto le debió haber costado a todas las generaciones de Juliaqueños llegar hasta aquí y la mejor forma de honrar todo ese esfuerzo, es haciendo que Juliaca siga avanzando.

La provincia está a punto de cumplir 100 años, y de cara a ello, se tienen que trazar nuevas metas, nuevos proyectos, tratar de superar a ciudades como Arequipa o Cuzco y por sobretodo, poner todo nuestro esfuerzo en que Juliaca sea una ciudad más hermosa para nosotros y para los futuros Juliaqueños.

Uno de los eventos más violentos y dolorosos de la reciente historia de Juliaca. Este se dio en el marco de las protestas sociales del 2022-2023, donde la población en su mayoría exigía el cierre del congreso, adelanto de elecciones y la renuncia de la recientemente proclamada presidenta de la república Dina Boluarte en reemplazo del ex presidente Pedro Castillo.

Las protestas se habían retomado con más fuerza desde el 4 de enero del 2023, pero los hechos más importantes se produjeron el 9 de enero del mismo año. A la ciudad de Juliaca arribaban pobladores de diferentes provincias y distritos de la zona norte de Puno, para aunarse en un solo grito. Las protestas empezaron en el centro de la ciudad y ya empezando la tarde los manifestantes se trasladaron hasta las cercanías del aeropuerto Inca Manco Cápac de Juliaca, la consigna de los marchantes era tomar dicho aeropuerto y es en los alrededores de este donde se produjeron los choques más crueles y la mayoría de muertes. Los enfrentamientos dejaron como triste saldo la muerte de 18 manifestantes y más de un centenar de heridos, producto de disparos de armas de fuego hechos por la policía; aquel día más tarde, también perdió la vida un miembro de la policía nacional del Perú. Claramente las fuerzas del orden no supieron controlar la situación y esta se les fue de las manos. Los hechos suscitados aquel día aún traen repercusión y este capítulo de la historia juliaqueña aún no se cierra.

Historia de Juliaca